Las bondades de la bicicleta como un medio de transporte eficiente y sustentable ya no son discutibles, además de los sabidos beneficios para la salud, su bajo impacto ambiental y reducción de los tiempos de viajes en centros poblados consolidando beneficios económicos y sociales.
Según la Federación de Ciclistas Europeos (FCE) el uso de bicicletas en centros urbanos significa un ahorro de unos 513.000 millones de euros anuales solo en la comunidad europea, si a esto le sumamos que puede servir para transportar carga, los impactos positivos se multiplican. Por ello la FCE dará a conocer este 28 de febrero hasta qué punto favorecen las bicicletas de carga en la reducción de los desplazamientos urbanos relacionados con el transporte de mercancía, asociado a bajar las emisiones de CO2 en las ciudades.
En Bolivia, el transporte urbano de carga es prestado generalmente por motocicletas o vehículos pequeños a combustión, sin embargo, en Cochabamba ya existe una alternativa. En esta ciudad es ECODELIVERY la empresa precursora en la prestación del servicio de mensajería en bicicletas y transporte de carga de última milla en bicicargos.
Conversamos con Miguel Fernández Vázquez Gerente de la Startup Innovación Sostenible y CEO de ECODELIVERY que desde el 2017 revoluciono la oferta de delivery en el país ya que es el único servicio integral del rubro de bajo impacto ambiental al utilizar solamente bicicletas en su servicio de mensajería. Ese emprendimiento en 2019 diseño y construyó una bicicargo para ofertar transporte de carga, la apuesta responde a la visión de que “las bicicargo promueven el uso de la micromovilidad eléctrica e inciden directamente en el proceso de descarbonización del parque automotor y cambio de matriz energética, normalizando el uso de nuevos vehículos construidos localmente para combatir problemáticas globales”.
Sin embargo, pese a lo innovador de la propuesta el camino de Ecodelivery y las bicicargo no fue fácil, tuvieron que pedalear cuesta arriba por terreno escarpado dos años para conseguir posicionar el servicio, y recién la gestión pasada 2022, empresas locales comenzaron a confiar en el uso de las bicicargo haciéndose su presencia más visible en el centro urbano de Cochabamba, a decir de su CEO “la respuesta del público no fue tan rápida como la esperábamos”, pese a ello, las dificultades y la competencia esta convencido “que se debe potenciar el uso de las bicicargos para cambiar el chip en la gente y pueda normalizar el uso de este tipo de vehículos en el día a día”
Las bicicletas de carga en todo el mundo se han convertido en una modalidad de transporte de alto impacto en las ciudades, en las palabras de Miguel, “las ciudades son el mejor lugar para utilizar este tipo de vehículos, por el volumen de contaminación y tráfico existente generado en la logística de última milla” frente a esto, “las bicicargo muestran eficiencia y agilidad”.
El siguiente paso es generar evidencia, así ECODELIVERY monitorea la cantidad de entregas, los kilómetros recorridos, las velocidades de circulación que está teniendo este transporte, comparando sus datos con los de vehículos tradicionales de reparto o de carga, para contar con un argumento adicional para que el gobierno municipal y la empresas locales inviertan, tanto el primero en infraestructura contemplando mayor cantidad y calidad de ciclovías, y los segundos se decidan a apostar en el uso de bicicargos para su transporte de última milla, no solo por el impacto económico, sino también social, pues promover su uso es una oportunidad que permitirá disminuir el cóctel de smog que respiramos todos los días que nos hace propensos a enfermedades respiratorias y cáncer.
Un dato importante adicional para ser tomado en cuenta por todos, está comprobado que casi el 50% de los movimientos de mercadería dentro de las ciudades puede perfectamente hacerse en bicicletas y el 90% de los traslados de compras desde el mercado o el supermercado puede realizarse en bicicargos siendo más rápido, eficiente, barato y sobre todo menos contaminante.
Con estos argumentos, queda claro que todos podemos generar cambios positivos y que es momento de entender que el transporte en dos ruedas, sin motores, ni emisión de gases es el futuro. ¡El futuro responde a nuestra decisión, y el futuro es ahora!
Marcela Fernandez F.